En Infantil, cada jornada está llena de oportunidades para que nuestros alumnos crezcan, aprendan y disfruten de su entorno. A las 9h, las tutoras reciben a los niños en el patio. Al entrar en clase, todos los alumnos, incluso los más pequeños, con gran destreza, se quitan su abrigo y lo cuelgan junto con su mochila, en una percha personalizada con su nombre y foto. Este sencillo gesto es una muestra de la importancia de fomentar la autonomía desde edades tempranas.
Al comenzar la mañana, los niños disfrutan de un rato de asamblea, donde se expresan, cuentan anécdotas y muchas veces cantan canciones o poesías aprendidas relacionadas, por ejemplo, con la estación del año que están viviendo.
Uno de los momentos más esperados de la jornada es la clase de ajedrez. Los alumnos de 5 años disfrutan mucho iniciándose en este juego. Aprenden con alumnos voluntarios mayores, quienes les enseñan los movimientos básicos y les ayudan a respetar los turnos, favoreciendo su desarrollo cognitivo y social.
A las 11h, llega el recreo, y los más pequeños participan en el proyecto «Entrepatios», donde los alumnos de Secundaria les preparan juegos y actividades. Casi 90 alumnos participan en este proyecto del centro que permite que pequeños y mayores compartan un tiempo mutuo de aprendizaje y de disfrute. Las risas están aseguradas y a todos les encanta.
La mañana finaliza con una actividad musical, donde los niños exploran múltiples instrumentos, como el triángulo o las maracas, desarrollando su creatividad y amor por la música. A las 14h termina la jornada escolar, algunos se van a casa y otros comen en el comedor del colegio.
¡Cada día es una jornada llena de aprendizajes y momentos especiales para ellos!